06. Premio Nobel de medicina para científicos de Francia que descubrieron el VIH
Los franceses Luc Montagnier y Françoise Barré-Sinoussi fueron galardonados por su hallazgo de hace 25 años. El Nobel cierra por completo la controversia de ese equipo con el norteamericano Gallo. Y hace justicia con Barré-Sinoussi, que quedó a la sombra de Montagnier.
Françoise Barré-Sinoussi, descubridora del virus del VIH, fue premiada con el Nobel de Medicina, en conjunto con Luc Montagnier, que dirigía el laboratorio francés donde, en 1983, se efectuó el hallazgo. La decisión del Comité Nobel cierra definitivamente la polémica sobre la atribución del descubrimiento: durante años la autoría fue discutida entre Montagnier y el investigador norteamericano Robert Gallo, en el marco de una guerra de patentes entre los gobiernos de Estados Unidos y Francia. Entretanto, quedaba en sombras la participación central de Barré-Sinoussi, “quien fue la que más directamente llevó adelante la investigación”.
Luc Montagnier, que hoy tiene 76 años, nació el 18 de agosto de 1932 en la localidad francesa de Chabris; se formó como médico investigador en su país y en Gran Bretaña. En 1960 ingresó en el Centro Nacional francés de Investigación Científica (CNRS), donde, en 1974, fue designado director de investigaciones. En 1972, había creado el departamento de virología en el Instituto Pasteur, y en 1982 creó un equipo de investigación dedicado a buscar la causa del sida.
En 1984, sin embargo, en el Instituto Nacional del Cáncer de Estados Unidos, el laboratorio dirigido por Robert Gallo anunció a su vez haber encontrado un virus causante del sida y presentó un reclamo por patentes, que entró en controversia con el sostenido por la institución francesa. En 1987, el presidente Ronald Reagan y el primer ministro francés Jacques Chirac acordaron dividir las ganancias por patentes de los análisis de sangre para detectar el VIH.
Más tarde, Gallo admitió que sus propios cultivos habían sido contaminados “accidentalmente” con el virus aislado por los investigadores franceses, que habían enviado muestras a la institución norteamericana. En 1994, el gobierno de Estados Unidos reconoció que el virus había sido aislado inicialmente en Francia y aceptó dar a este país una proporción mayor de las ganancias por testeos clínicos. Tras conocerse la asignación del Nobel, Robert Gallo felicitó a los ganadores.
El Comité Nobel sostiene en su dictamen que “nunca antes la ciencia y la medicina habían sido tan rápidos para descubrir, identificar el origen y proveer tratamiento para una nueva enfermedad”.
Montagnier recibió la noticia del premio en Costa de Marfil, mientras participaba en un congreso de su especialidad: “Mi reacción fue pensar en todos los que murieron por el sida y en quienes siguen vivos y luchan contra la enfermedad”, declaró el científico, que se desempeña en la Fundación Mundial para la Investigación y Prevención del sida. Barré–Sinoussi es directora de laboratorio en el Instituto Pasteur. A cada uno de ellos le corresponderá la cuarta parte del premio de diez millones de coronas suecas, equivalentes a 1,02 millones de euros, que recibirán el 10 de diciembre en Estocolmo.
Fuente: Página 12/ Notisash