17. Rusia: Se agrava la homofobia de Estado, prohíben en San Petersburgo la “propaganda homosexual”
La Asamblea Legislativa de San Petersburgo ha aprobado, por 29 votos a favor, 5 en contra y 1 abstención (y con 15 de sus miembros ausentes), la normativa homófoba que se viene discutiendo en esa ciudad de Rusia desde hace semanas. La histórica San Petersburgo se une así a las regiones de Arkhangelsk, Ryazan y Kostroma, que ya disponen de legislaciones de este tipo. También en Moscú, la capital, se prepara el terreno para una medida similar.
Este proyecto de ley fue presentado por primera vez en noviembre de 2011, pero sus lecturas se pospusieron desde entonces. El proyecto de ley prohíbe «los actos públicos destinados a hacer propaganda de la sodomía, el lesbianismo, la bisexualidad y la transexualidad entre los menores de edad”, que pasan a ser castigados con multas de hasta 5.000 rublos (126 euros) para los ciudadanos, de 50.000 rublos (1.260 euros) para los funcionarios, y de entre 250.000 y 500.000 rublos (entre 6.300 y 12.600 euros) para las personas jurídicas.
El proyecto de ley también prohíbe la «propaganda pedófila entre los menores de edad» y, según los informes recibidos, en el transcurso de su lectura, su autor, Vitaly Milonov, miembro de la Asamblea Legislativa por el partido gubernamental Rusia Unida, equiparó la homosexualidad a la pedofilia y al consumo de drogas, acusando a quienes se oponían al proyecto de ley de no preocuparse por el bienestar de los menores de edad. De este modo, este proyecto de ley vincula el abuso sexual de menores con la actividad sexual privada y consentida y con la expresión de género personal. No es necesario señalar que no existe relación alguna entre estas cuestiones. Las normas sobre los derechos humanos reconocen que los Estados tienen el derecho de regular la actividad sexual que infrinja los derechos de terceros. Ni las relaciones sexuales consentidas ni la identidad de género y su expresión, pertenecen a esta categoría.
Se han aprobado leyes similares en las regiones rusas de Riazán y Arkángel y, de acuerdo con los informes recibidos, también se han propuesto en Moscú y Novosibirsk. Existe el peligro de que otras regiones puedan seguir estos ejemplos.
La nueva normativa prohíbe lo que llama “propaganda homosexual” a menores, algo que en la práctica hará imposible la lucha contra el acoso homofóbico y los crímenes de odio y que dificultará sobremanera la celebración de eventos LGTB públicos, como las marchas del Orgullo y similares. De poco han valido las condenasdel Parlamento Europeo, del Departamento de Estado de Estados Unidos o las diversas acciones de protesta de activistas LGTB y de derechos humanos, ya sea online (a través de la plataforma AllOut, que ha conseguido ya más de 270.000 firmas) o mediante manifestaciones y concentraciones, como las que fueron convocadas ante las Embajadas y Consulados de Rusia en varias ciudades del mundo (como Berlín, Buenos Aires, Milán, Nueva York, París o Río de Janeiro). Hace más dos meses, precisamente, las más de 246.000 adhesiones conseguidas entonces a través de AllOut le fueron trasladadas a Catherine Ashton -jefa de la diplomacia de la Unión Europea- en presencia de los eurodiputados Ulrike Lunacek y Michael Cashman, presidentes del Intergrupo LGTB del Parlamento Europeo.
San Petersburgo ha pasado a ser un lugar declaradamente hostil a las personas LGTB. Comienza ahora una larga carrera de obstáculos de los activistas rusos para luchar judicialmente contra esta ley, y llegar si es necesario hasta el Tribunal Europeo de Derechos Humanos, que tiene ya pendiente estudiar una demanda contra el estado ruso presentada por la activista Irina Fedotova por la primera de estas leyes, la aprobada en Ryazan. Un fallo favorable a los demandantes tendría, en este caso, gran importancia. También el Comité de Derechos Humanos de Naciones Unidas tiene previsto estudiar el caso de Ryazan.
Fuente: dosmanzanas.com y Amnistía Internacional.